En Insoto contamos con diversos productos dentro de los que destacan las chapas o placas de corrugado. ¿Qué es el acero corrugado y cuáles son sus usos en la industria metalmecánica? Este tipo de placas (y otras piezas de corrugado) son muy útiles para la construcción, aunque también se les da otras aplicaciones. ¡Te lo contamos en este artículo!
¿Qué son las placas de corrugado?
Para hablar de las placas de corrugado, tenemos que hablar del acero corrugado. Básicamente, una placa de corrugado es una lámina (tipo chapa) de acero que tiene corrugas o estrías discontinuas que permiten una mejor adherencia a materiales como el hormigón.
El acero corrugado es un material muy versátil y muy utilizado gracias a su resistencia; además, es fácil de cortar y, lo mejor, es que es posible encontrarlo a precios muy asequibles. Aunque tiene una apariencia muy simple, el acero corrugado es uno de los materiales más utilizados cuando se trata de la construcción de obras. Precisamente, la simplicidad del acero corrugado es lo que lo convierte en el mejor aliado para la edificación.
Por ejemplo, una varilla, un tubo y hasta las placas de corrugado pueden doblarse y plegarse en cualquier dirección porque una de sus propiedades es la ductilidad. Precisamente, la corrugación es la que aporta un carácter estructural que hace únicas a las piezas que se fabrican con este material.
La ductilidad es una propiedad presente en estas piezas gracias al acero y la forma en la que se fabrica. El acero corrugado es, en realidad, acero laminado en caliente. Este material es de alta resistencia y en su interior encontramos una aleación de hierro y carbono. Para ser más específicos, el acero corrugado incluye 0,22% de carbono; 0,05% de azufre; 0,05% de fósforo, 0,12% de nitrógeno y un 0,80% de cobre.
¿Cómo se fabrican las placas de corrugado?
Antes de hacer las placas de corrugado, es necesario preparar el acero como tal. El proceso es bastante sencillo. Es necesario utilizar barras de acero solidificado; estas se laminan hasta que adquieren el espesor que se desea. Una vez hecho este proceso, es necesario prensar (en el caso de las placas) y cortar. Después, se corruga la pieza.
Para generar las corrugas se utiliza una máquina que cuenta con un par de ruedas dentadas. Cuando se gira una rueda, la otra también gira de manera automática. Al colocar una placa de acero entre estas dos ruedas, entonces, del otro lado de las ruedas, aparece una placa de acero regular. Es así como se fabrican las placas corrugadas, ¡Un proceso muy sencillo!
Las ventajas de las placas de corrugado
Las placas de corrugado se emplean para la construcción interna de cualquier estructura, lo mismo sirven para edificar techos que paredes. ¿Y por qué es buena idea utilizar piezas de este material? Te contamos que, en general, el uso de piezas de corrugado para la construcción aporta grandes ventajas. La primera, como ya adelantamos, es la ductilidad.
El corrugado también supone mayor capacidad de deformarse antes de un punto de ruptura. Por otra parte, la apariencia corrugada permite que las piezas, como las placas, puedan adherirse fácilmente (y mejor) a materiales aglomerantes. Prácticamente, las líneas de corrugado impiden que el cemento caiga o escurra una vez que se ha adherido la placa.
Por último, cabe destacar estas ventajas en específico.
- Calidad. La calidad de las placas de corrugado depende, a su vez, de la calidad del acero que se utiliza para su fabricación.
- Bajo coste de mantenimiento.
- No es un material inflamable.
- Conformabilidad, durabilidad y conductividad.
- Es resistente a las plagas y a los movimientos sísmicos.
- Es fácil de soldar y de manipular.
- Estabiliza y refuerza las obras.
- Genera poco desperdicio al tratarse de un material reutilizable.
- Las placas de corrugado son maleables y ligeras.
Usos y aplicaciones
Ya hemos visto que estas placas se suelen utilizar en la construcción de inmuebles, pues son perfectas para contener mezclas como el cemento. En lo que a construcciones de ingeniería se refiere, las placas sirven para los techos y muros, pero su uso no se limita a esta industria.
Las placas se emplean también en la construcción naval para los paneles de las embarcaciones; son ampliamente utilizadas en el sector del transporte, por ejemplo, a manera de pantallas de aislamiento acústico, para proteger puentes y hasta como barandillas de carreteras. Por otra parte, en la agricultura y ganadería, las placas son un elemento utilizado para la construcción de los campos de animales o para fabricar vallas para los cultivos.
Cabe destacar que las placas también se emplean para la construcción de alguna maquinaria industrial, así como paneles solares, instalaciones de protección contra incendios y de recolección y almacenamiento de agua de lluvia, entre otras.
.