En Insoto contamos con un amplio catálogo de productos del sector de la siderurgia, pero también trabajamos con todo tipo de materiales de construcción, hierro y metales. Hoy queremos hablarte de las placas de calibrado para la industria de los mecanizados. ¿Qué son y cuáles son sus principales aplicaciones?
El papel de las placas de calibrado en la industria de los mecanizados
En la industria metalmecánica, la precisión y la exactitud son fundamentales para garantizar la calidad de los productos fabricados. Para alcanzar estos altos estándares, se utilizan distintas herramientas y dispositivos, entre los cuales destacan las placas de calibrado. Las placas de calibrado en la industria de los mecanizados se utilizan en todo tipo de sectores, pues están pensadas para no sufrir ninguna modificación.
A las placas de calibrado, también se les conoce como placas de medición o patrones de calibrado, y son herramientas de referencia que se utilizan para comprobar y ajustar la precisión de las máquinas y los instrumentos de medición. Las placas se diseñan con superficies extremadamente planas y lisas, pues, como ya adelantamos, están pensadas para no sufrir ninguna modificación. Además, se fabrican con materiales de alta estabilidad dimensional como el granito o el acero. La función principal de estas placas es proporcionar una referencia exacta para la calibración de otros instrumentos y equipos de medición.
Los tipos de placas de calibrado
Existen varios tipos de placas de calibrado en la industria de los mecanizados y cada una ha sido diseñada para cumplir con diferentes requisitos y aplicaciones en la industria. Te contamos cuáles son algunos de los tipos más comunes.
Placas de granito
Las placas de calibrado de granito son de las más utilizadas debido a su excelente estabilidad dimensional y resistencia al desgaste. El granito es un material no magnético capaz de no corroerse y de mantener su precisión a lo largo del tiempo, lo que las hace ideales para aplicaciones de alta precisión.
Placas de acero
Las placas de acero se utilizan ampliamente en la industria de los mecanizados porque son duraderas y resistentes, aunque pueden ser más susceptibles a la corrosión y a los cambios dimensionales debido a las variaciones de temperatura. Sin embargo, estas placas son perfectas para aplicaciones donde la estabilidad térmica no es un factor crítico.
Placas de cerámica
Estas placas son menos comunes, sin embargo, ofrecen una gran resistencia al desgaste y una buena (y alta) estabilidad térmica. Las placas de cerámica son bastante ligeras y no magnéticas, cosa que las convierte en la mejor alternativa para ciertas industrias con entornos de trabajo especializados.
La importancia de las placas de calibrado en la industria de los mecanizados
Como ya adelantamos, la precisión es esencial en la fabricación de componentes mecanizados, y las placas de calibrado juegan un papel muy importante a la hora de asegurar que las máquinas y los instrumentos de medición funcionen correctamente. ¿Por qué son tan importantes las placas de calibrado?
Empezamos por contarte que se utilizan para verificar la precisión de las máquinas herramienta, así como de los instrumentos de medición. Al asegurarse de que estos equipos estén correctamente calibrados, es posible producir piezas con tolerancias muy exigentes y de producción en serie, cosa que mejora la calidad del producto final.
Es importante destacar que, con el tiempo, las máquinas y los instrumentos de medición pueden desviarse de sus configuraciones originales a causa del desgaste y otros factores. Las placas de calibrado permiten realizar ajustes periódicos para, de esta forma, mantener la precisión y la exactitud de estos equipos. Esto prolonga su vida útil y optimiza su rendimiento.
Por otra parte, el uso de placas de calibrado ayuda a minimizar los errores en la fabricación de piezas. Queremos destacar que las placas proporcionan una referencia de alta precisión; esto supone que es posible identificar y corregir, de forma rápida, desviaciones y variaciones. ¿Por qué esto es importante? Porque reduce el desperdicio de material y mejora la eficiencia de los procesos productivos.
